jueves, 22 de septiembre de 2011

Nadie debería perderse un ecodoppler


Recomiendo fervientemente la experiencia de hacerse un ecodoppler. No es sencilla porque la medicina actual no favorece el goce estético. Pero, ¡qué sensación subacuática e inolvidable acompaña el poderoso sonido de la sangre corriendo por las venas! Ballenas y delfines deben saber algo al respecto porque, desde hace un tiempo, atosigan con mensajes incomprensibles mi casilla de mail.

Microcuento de Graciela Pérez Aguilar.

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